TEST
DE RORSCHACH
El test de Rorschach es una
técnica y método proyectivo de psicodiagnóstico creado por Hermann Rorschach
(1884-1922). Se publicó por vez primera en 1921 y alcanzó una amplia difusión
no sólo entre la comunidad psicoanalítica sino en la comunidad en general.
El test se utiliza principalmente para evaluar la personalidad. Consiste en una serie de
10 láminas que presentan manchas de tinta, las cuales se caracterizan por su
ambigüedad y falta de estructuración. El psicólogo pide al sujeto que
diga qué podrían ser las imágenes que ve en las manchas, como cuando
uno identifica cosas en las nubes o en las brasas. A partir de sus respuestas,
el especialista puede establecer o contrastar hipótesis acerca del
funcionamiento del sujeto.
MANCHA ③
Esta
mancha se supone que detecta las preferencias sexuales.
La mayoría de la gente ve ahí dos
figuras humanas con importantes pechos o penes.
Si ambas
figuras son consideradas masculinas, uno es heterosexual, en caso contrario,
homosexual.
MANCHA ⑤
La
interpretación de Rorschach es la más obvia: un murciélago o una mariposa.
No diga nada más. Ver las
prolongaciones de las alas como bocas de cocodrilo significa hostilidad, ver
pies o tijeras indica castración.
Si se dan
demasiadas interpretaciones... ¡esquizofrenia! Y también si se ve gente
moviéndose.
MANCHA ⑧
La
respuesta más corriente la relaciona con animales de cuatro patas, y no verlo
es una mala señal: ansiedad.
También un árbol, e incluso mariposa.
Mejor
todavía: diseño heráldico o un árbol de Navidad con ornamentos.
MANCHA ①
La
rapidez de respuesta e indicativa de cómo uno reacciona ante situaciones
nuevas.
Lo mejor son las respuestas obvias,
dadas enseguida.
Por
ejemplo, murciélago, mariposa, polilla y también mujer (en el centro, arriba),
siempre que no se comente que le falta la cabeza. Algunas interpretaciones
raras (máscara, cara de animal) pueden sugerir paranoia.
MANCHA ⑦
Revela
nada menos que los sentimientos hacia la madre.
Todo el mundo ve en ella dos
mujeres. Decir “brujas”, “solteronas”, etc., indica conflicto, poco amor o
incluso aborrecimiento.
Nubes,
fatal. Peor ver una cáscara de nuez: ¡fijación bulbar!
El
espacio entre las dos mitades puede ser también interpretado como una lámpara
de aceite, pero sólo los esquizofrénicos lo ven.
MANCHA ④
A primera
vista es difícil (¿cabeza de perro, dragón?), pero una observación atenta
revela un hombre visto desde debajo. Vale también ver en ella un gorila, oso u
hombre con abrigo.
¡Ojo con
decir que el monstruo está atacando! Es fatal: representa al propio padre.
MANCHA ②
Es
importante ver esta mancha como dos figuras humanas (mujer o payaso). Si no,
uno tiene problemas en su relación con la gente.
Otras
respuestas son también válidas: entrada de una cueva, mariposa e incluso
vagina.
MANCHA ⑩
Esta
última mancha escudriña su capacidad organizativa.
Aquí puede haber de todo: cangrejos,
la cabeza de un conejo, huevos fritos.
Buenas
respuestas: algo visto a través del microscopio.
Algunos
llegan a ver caras.
Si ve el
humo de una pipa, tiene una fijación oral.
Ver
testículos y penes es ansiedad de castración.
MANCHA ⑥
La más
difícil.
El secreto está en voltearla.
La
interpretación más socorrida es un pene, pero es mejor decir que se parece a
una madriguera de animal.
También
una nube, dos máscaras teatrales, hombres, narizotas, etc.
En
conjunto, parece que revela las actitudes inconscientes hacia la sexualidad.
MANCHA ⑨
Pocas
respuestas buenas aquí.
Un fuego con humo, una explosión
(ojo, según qué interpretadores verán paranoia en ella), un mapa, una flor. Ver
una vagina en el centro, malo, malo.
En
definitiva, no hay mucho por ver.
El
psicólogo puede estar contando sus respuestas.
TEST TAT
La
técnica del T.A.T. reposa sobre una teoría de la personalidad, que a partir de
1938 Murray publica en su libro “Exploraciones de la personalidad”, donde
expone su sistema teórica centrado sobre la dualidad “necesidad-presión”
(“needs-press”), poniendo como hipótesis principal la identificación del
narrador al personaje central por medio del sesgo desde donde expresa sus
propias “necesidades”, siendo los demás personajes y/o el medio los encargados
de representar las presiones que resiente el narrador.
Ya en
1943 Murray presenta el Manual del T.A.T. en su forma definitiva, constituido
por un juego de 31 láminas y un manual de aplicación.
De las 31
láminas originales, quedaron seleccionadas aquéllas consideradas como las más
pertinentes y más significativas, siendo 18 las láminas seleccionadas, que
serán presentadas dentro de un orden que implica ir desde las láminas que
muestran situaciones mejor estructuradas a las de menor estructuración; las
diez primeras láminas, más figurativas, representan a personajes sexuados,
mientras que las láminas 11, 19 y 16 no reenvían a objetos concretos bien
definidos. Las láminas 1, 2, 3BM, 4, 5, 8BM son propuestas a los niños y
niñas, y a los hombres y mujeres; 6BM/7BM son propuestas a los niños y hombres;
6GF/7GF y 9GF, son propuestas a niñas y mujeres; 10, 11, 12BG, 13B, 19 y 16 son
propuestas a niños, niñas, hombres y mujeres, y la 13MF propuesta
únicamente a sujetos adultos hombres y mujeres. El orden es el
siguiente: 1, 2, 3BM, 4, 5, 6BM/7BM, 6GF/7GF, 8BM, 9GF, 10, 11, 12BG, 13B,
13MF, 19 y 16.
Grilla de
evaluación del T.A.T.
Serie “A”
y “B”
Las dos
primeras categorías que agrupan los procedimientos de las series “A” y “B”,
reenvían a procedimientos de elaboración del discurso que están en
correspondencia con los mecanismos de defensa neuróticos –en particular la
REPRESION- que son testigos de una conflictualización intrapsíquica, es
decir, de una lucha entre los sistemas del aparato psíquico en términos de la
1º Tópica freudiana: Preconsciente-consciente/inconsciente; o en términos de la
2º Tópica, como una lucha entre el Ello y el Superyó a través del Yo, lo que
supone la existencia de un espacio interno constituido, bien diferenciado
respecto del mundo exterior, espacio interno que servirá de escena al
despliegue y a la dramatización de los conflictos.
Estos
procedimientos están representados, en los dos casos, por organizaciones
psíquicas elaboradas, dominadas por el conflicto que:
· En
la Serie “A” es tomado a cargo por el pensamiento que es portador de la
expresión del deseo y la defensa
· En
la Serie “B” por la puesta en escena de relaciones interpersonales que
evidencian el afrontamiento entre las instancias.
Serie “C”:
La tercer
categoría “Procedimientos de la Serie “C”, trata de los mecanismos
de EVITAMIENTO del conflicto, por lo que se
denomina aconflictual. Se distinguen cinco categorías de procedimientos:
Serie
“C/P”* “FOBIA” *P=Phobie
Releva
los ordenamientos fóbicos, en los cuales dominan el evitamiento y la
huida. Su asociación con los procedimientos de la Serie “A” y/o “B” sigue
la naturaleza neurótica del conflicto. Así y utilizados en pequeña
cantidad estos procedimientos “P” van a permitir que las representaciones y
afectos reaparezcan bajo la forma del retorno de lo reprimido; estos relatos
elaborados desde esta modalidad guardan un cierto espesor simbólico, una cierta
resonancia fantasmática en relación con las solicitaciones latentes de la
lámina.
No
obstante, no hay que olvidar que estos procedimientos no tienen una
significación diagnóstica unívoca, pudiendo dar cuenta de modalidades de
funcionamiento distinto al neurótico.
Serie
“C/N” “NARCISISMO”
Reenvían
a modalidades narcisistas de funcionamiento psíquico, sobre todo al
sobreinvestimiento de la polaridad narcisistas del fantasma.
Aquí el
cuerpo ya no es investido para seducir como lo es en el registro histérico,
sino que es utilizado para comunicar y producir sentido.
Utilizados
de forma masiva, pueden ser la traducción de un retraimiento libidinal
narcisito que toma el lugar del conflicto libidinal.
Serie
“C/M” “MANÍA”
Reenvían
a mecanismos de tipo maníaco tomado en el sentido kleiniano de lucha
antidepresiva, buscando evacuar las representaciones y afectos depresivos,
también pueden estar sobre investidos como un llamado al otro.
Serie
“C/C” “COMPORTAMENTAL”
Hace el
repertorio de conductas actuadas que constituyen un recurso al comportamiento
durante la administración del test. Estas conductas están ligadas a una
dificultad momentánea o durable en el trabajo de elaboración psíquica y/o
inscribirse en una regulación o en un relanzamiento del proceso asociativo.
Hay que
distinguir dos modos particulares en las conductas actuadas:
- Aquéllas,
que en la relación con el clínico (transferencia), son la expresión de un
fantasma subyacente, pues los procesos de pensamiento necesarios para la
elaboración de los relatos no pueden tomar a su cargo
- Otros
que tienen como función la de tender hacia la descarga y la disminución de la
excitación y la tensión.
Serie
“C/F” “FÁCTICO”
Se
distinguen de los precedentes en la medida en que la inhibición no está
asociada a los mecanismos de represión que son reconocibles a través del
retorno de lo reprimido. La angustia está aparentemente ausente, y el
estímulo es investido como objeto real y no más como fuente de reactivación fantasmática.
El acento
está puesto aquí, de forma específica, sobre los elementos de la realidad
exterior, lo fáctico, lo cotidiano, lo concreto, las ideas recibidas que vienen
a sustituir a un mundo interno desfalleciente.
Utilizados
de manera masiva, se corresponde a modalidades de funcionamiento que se
caracteriza por la ausencia de conflicto intrapsíquico (personalidades “como
sí”) y también aquéllas definidas por Pierre Marty con la noción de
“pensamiento operatorio”, que son propias de la alexitimia o personalidades
psicosomáticas.
Todos los
procedimientos de la serie “C”, sea “C/P”, “C/N”, “C/M”, “C/C” o “C/F” pueden
aparecer en modalidades de funcionamiento psíquico variado. A evaluar,
entonces, si su utilización es transitoria, o bien, dominante.
SERIE
“E” “EMERGENTES EN PROCESO PRIMARIO”
Reagrupa
las modalidades de pensamiento saturado en proceso primario.
La
presencia de mecanismos de la serie “E” en pequeñas cantidades es esperable en
el T.A.T., su aparición pone el acento sobre una cierta permeabilidad de las
instancias y una flexibilidad que autoriza la irrupción y la circulación de
fantasmas y/o de afectos más masivos, sin que el sujeto esté completamente
desorganizado.
Los
procedimientos de la serie “E” no tienen tampoco una significación diagnóstica
unívoca; todo dependerá de su aparición, su repartición y su asociación con
procedimientos de otras series.
Se
distinguen en esta serie, procedimientos que traducen:
- De
fallos mayores en las conductas perceptivas y en el anclaje en la realidad externa
(ítems E1 a E6)
- De
perturbaciones profundas ligadas a la invasión fantasmática (ítems E7 a E10)
- De
trastornos mayores ligados a la relación de objeto, llegando incluso a
trastornos de la identidad (E11 a E16)
- De
trastornos ligados a la desorganización del pensamiento y del discurso, que a
partir de éstos, no se inscriben más dentro de una lógica de comunicación.
CONTENIDOS
MANIFIESTOS Y CONTENIDOS LATENTES EN LAS LÁMINAS T.A.T.
Lámina 1:
Manifiesto:
Un niño, la cabeza entre las manos, mira un violín puesto delante de él.
Latente: Reenvía
a la imagen de un niño, pone el acento sobre la inmadurez funcional frente
a un objeto de adulto (no es un juguete), objeto fálico. El conflicto será
la dificultad, hasta la imposibilidad de utilizar este objeto en lo inmediato,
encontrando los dos extremos, desde la posición depresiva (incapacidad,
impotencia), hasta la posición megalomaníaca (omnipotencia).
Lámina 2:
Manifiesto: “Escena
campestre”. Un hombre con un caballo, una mujer apoyada sobre un árbol,
una joven en primer plano que tiene libros.
Latente:
Reenvía al triángulo edípico padre-madre-hijo, pero sin noción de inmadurez
funcional. El conflicto será sobre la posición de la joven frente a la pareja,
que está objetivizada a nivel del contenido manifiesto por la diferencia entre
los dos planos. Cada personaje puede ser percibido como provisto a su
manera.
Lámina
3BM:
Manifiesto: Un
individuo tirado al pie de una banqueta (sexo y edad indeterminados, objeto
igualmente confuso, poco claro)
Latente: Reenvía
a la posición depresiva esencial presentando traducción corporal (no de
conflicto, sino desde la pérdida del objeto).
Lámina 4:
Manifiesto: Una
mujer cerca de un hombre que se aparta (diferencia de sexo, no de generación)
Latente: Reenvía
a una relación de pareja manifiestamente conflictual entre dos polos:
agresividad-ternura.
Lámina 5:
Manifiesto: Una
mujer de mediana edad, la mano sobre el picaporte de una puerta, mira al
interior de una pieza.
Latente: Reenvía
a una imagen femenina (maternal) que penetra y mira. El conflicto enviará,
frente a este tipo de imagen femenina, a la posibilidad o no de situarse frente
a una instancia superyoica.
Lámina
6BM:
Manifiesto: Un
hombre, de frente, con aire de preocupado, y una mujer anciana que mira hacia
fuera (diferencia de sexos, diferencia de generación).
Latente: Reenvía
a una relación madre-hijo en un contexto de malestar. El conflicto debe
anudarse alrededor de la interdicción del acercamiento edípico objetivado a
nivel de la imagen, por el espacio que separa a los protagonistas, como así
también por su posición respectiva (no acercamiento).
Lámina
6GF:
Manifiesto: Una
joven mujer sentada en primer plano volviéndose hacia un hombre que se aproxima
hacia ella (no diferencia de generación marcada, sí diferencia de sexo)
Latente: Reenvía
a una relación heterosexual en un contexto de deseo libidinal y de defensa
contra el deseo (comprendida la culpabilidad). El deseo es objetivado por
el movimiento del uno sobre el otro, y la defensa por la separación de los
planos. El acercamiento edípico está ofrecido e interdicto a la vez.
Lámina
7BM:
Manifiesto: Dos
cabezas de hombre, cabeza con cabeza; uno, “el viejo”, vuelto hacia el otro
“joven” que hace una mueca de disgusto (diferencia de generación, no se sexo,
no hay inmadurez funcional)
Latente: Acercamiento
de tipo padre-hijo, en un contexto de reticencia desde el hijo a nivel de las
ideas (cuerpo excluido). El conflicto debe anudarse alrededor del
acercamiento entre esos dos personajes, entre dos polos: ternura-oposición.
Lámina
7GF:
Manifiesto: Una
mujer, libro en la mano, inclinada hacia una niña de aspecto soñadora que tiene
un muñeco entre sus brazos (diferencia de generación, inmadurez funcional para
la niña)
Latente: Reenvía
a una relación tipo madre-hija en un contexto de reticencia por parte de la
niña (rivalidad, identificación). El conflicto debe anudarse alrededor de
la identificación con la madre, favorizada por ésta.
Lámina
8BM:
Manifiesto: Un
hombre acostado, dos hombres inclinados sobre él con un instrumento. En
primer plano un joven solo que da la espalda a la escena, y un fusil (no hay
diferencia de sexo, sí diferencia de generación, no hay inmadurez funcional)
Latente: Reenvía
a una escena de agresividad abierta a través de la presencia de hombres adultos
y un adolescente en un contexto de posiciones contrastantes
activo/pasivo. El conflicto debe anudarse alrededor de la escena de
agresividad abierta del 2º plano, ligándola al joven y al fusil del 1º
plano. Reenvía al problema de la agresión corporal que puede ser vivida a
nivel de la castración, o a nivel de la destrucción.
Lámina
9GF:
Manifiesto: Una
joven mujer detrás de un árbol, portando unos objetos, mirando a una segunda
joven mujer que corre debajo (no hay diferencia de generación, ni de sexo, no
inmadurez funcional)
Latente: Reenvía
a una situación de rivalidad femenina, a un contexto dramatizado. El
conflicto debe anudarse alrededor de la rivalidad femenina acentuada a nivel
del material por la semejanza entre ambas mujeres, y por el hecho que una
pareciera vigilar a la otra.
Lámina 10:
Manifiesto: Una
pareja que se abraza (sólo las caras están representadas, el contraste blanco y
negro está acentuado)
Latente: Reenvía
a la expresión libidinal a nivel de la pareja. La imagen está lo bastante
poco clara para que pueda haber diversas interpretaciones en cuanto al sexo y a
la edad de los dos personajes. La fantasía debe igualmente dar cuenta del
halo dramático objetivado por el contraste blanco-negro.
Lámina 11:
Manifiesto: Paisaje
caótico de vivos contrastes de sombras y de claridades, se ve una especie de
pico (detalle a la izquierda estilo dragón o serpiente)
Latente: Reactivación
de una problemática pregenital. Algunos elementos más estructurados
(puente, ruta…) pueden permitir una remontada hacia un nivel menos arcaico
(regresión posible o no).
Lámina 12
BG:
Esta
lámina originalmente propuesta a niños y niñas, se muestra también interesante
para adultos de ambos sexos.
Manifiesto:
Un paisaje tipo bosque al borde de un curso de agua, mostrando en primer plano
un árbol y una barca; vegetación y el segundo plano está poco preciso; el
gráfico está relativamente aireada con dominancia de claridad.
Latente: El
aspecto figurativo y familiar del material pone en obra las capacidades
elementales para diferenciar el mundo interno del mundo externo, y reenvía a
una capacidad perceptiva conocida, en referencia a las buenas experiencias
pregenitales. A evaluar si aún en ausencia del personaje sobre la imagen,
el sujeto puede reconocer al objeto sin temer su pérdida, componiendo un
espacio de representación que ocupe la escena mental. Esto se relaciona
directamente a los modos de elaboración de la posición depresiva.
Lámina 13
MF:
Manifiesto: Una
mujer acostada, el pecho desnudo, y un hombre en primer plano, el brazo delante
de la cara
Latente: Reenvía
a la expresión de la sexualidad y la agresividad en la pareja.
Lámina 13
B:
Manifiesto: Un
niño sentado en el umbral de una cabaña de planos disyuntos (contraste entre
luz al exterior y muy negro al interior)
Latente: Reenvía
a la capacidad de estar solo, el acento está puesto sobre la inmadurez
funcional (imagen de un niño), y sobre la precariedad del refugio maternal
simbolizado por la cabaña (capacidad de fantasear el objeto ausente).
Lámina 19:
Manifiesto: Imagen
surrealista de casa bajo la nieve o de barco en la tempestad, con fantasmas,
olas…
Latente: Reactivación
de una problemática pregenital. El estímulo puede evocar un entorno que
permita la proyección del bueno y malo objeto. La lámina empuja a la
regresión y a la evocación de fantasmas fobígenos.
Lámina 16:
Manifiesto: Lámina
blanca para el sujeto.
Latente: Reenvía
a la forma de cómo el sujeto estructura sus objetos privilegiados y a las
relaciones que establece con ellos (nivel en el cual se ubica; peso e impacto
de los procedimientos defensivos). En la ausencia de un soporte dado por
la imagen, los elementos transferenciales pueden devenir impregnadas.
Por qué no pusiste las manchas y las láminas de los test de Rorschach y el del TAT?
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Eliminar¿Dónde está tu biografía?
ResponderEliminarEs lo primero que publiqué... la publicación está como ¿Quién soy?
EliminarNo está revisado aún, y está en publicaciones antiguas.
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